Somos
hortelanos ecológicos.
En
el año 2009 dimos el salto de dejar nuestra vida en Madrid para
emprender en una nueva tierra un proyecto vital nuevo. Esa tierra
elegida fue Fuentes de Magaña, un pequeño pueblo, con 40 habitantes
situado al noreste de Soria, en una comarca conocida como Tierras
Altas, una comarca que cuenta con el índice de despoblación más
alto de España y segundo más alto de todo Europa (un poquito más
de 1 hab/km2, casi la misma densidad que el Desierto del Sahara).
El
paso por esta tierra fue una aventura trepidante que puedes seguir
paso a paso consultando las entradas de este blog. Alguna de ellas
fueron éxitos que nos hicieron disfrutar y crecer y aprender
muchísimo, otras sin embargo nos empujaron también al paso que
dimos después de dejar esa tierra y trasladarnos a esta en la que
estamos ahora BONASTRE. Esa experiencia puedes seguirla desde nuestra
página www.lalegriadelarehuerta.com
Y
lo mejor sin duda de todo ello, las personas que nos acompañaron y
siguen acompañando.
Desde nuestra iniciativa pretendemos alcanzar dos objetivos:
- Ayudar a reconstruir el sistema económico rural como paso imprescindible para la pervivencia de nuestros pueblitos heridos de muerte. No podemos permitirnos su pérdida.
- El otro objetivo está comprometido con la protección de nuestro medio natural, comenzando por nosotros mismos, lo que nos nutre y lo que nutre nuestra tierra.
Creemos en que vale la pena el intento de recuperar nuestra agricultura y sus semillas que la hacen posible, romper con el monopolio y la propiedad de un bien universal que va a parar a manos de los grandes laboratorios farmacéuticos y multinacionales. La transgenia agrícola es económica y socialmente inmoral.
Creemos que es posible otra manera de producir producto, de producir riqueza y de consumir.
Creemos en la utopía: en la misma que movió a las sufragistas y feministas, a los movimientos obreros de otro siglo. Creemos en la utopía actual de un mundo sostenible. Apostamos por la revolución tranquila y sin pausa, por la revolución de las conciencias".
¡ESTAMOS POR LA VÍA CAMPESINA!
Desde nuestra iniciativa pretendemos alcanzar dos objetivos:
- Ayudar a reconstruir el sistema económico rural como paso imprescindible para la pervivencia de nuestros pueblitos heridos de muerte. No podemos permitirnos su pérdida.
- El otro objetivo está comprometido con la protección de nuestro medio natural, comenzando por nosotros mismos, lo que nos nutre y lo que nutre nuestra tierra.
Creemos en que vale la pena el intento de recuperar nuestra agricultura y sus semillas que la hacen posible, romper con el monopolio y la propiedad de un bien universal que va a parar a manos de los grandes laboratorios farmacéuticos y multinacionales. La transgenia agrícola es económica y socialmente inmoral.
Creemos que es posible otra manera de producir producto, de producir riqueza y de consumir.
Creemos en la utopía: en la misma que movió a las sufragistas y feministas, a los movimientos obreros de otro siglo. Creemos en la utopía actual de un mundo sostenible. Apostamos por la revolución tranquila y sin pausa, por la revolución de las conciencias".
¡ESTAMOS POR LA VÍA CAMPESINA!